¿Si Murieras En este momento, A donde Crees que Iría tu alma?

jueves, 15 de abril de 2010

"Ven y ve"

Seis jóvenes caminaban por las calles de la urbanización La Guaria, en La Aurora de Alajuelita, el miércoles a las 6:45 p.m, mi esposa Xinia, junto con mi hija Kathering, Ronny Bonilla y Melisa Rojas, habían salido a invitar a los vecinos al estudio bíblico, regresaban con un numeroso grupo de niños. Al pasar cerca de los jóvenes, de repente mi esposa se volvió a los jóvenes y le dijo: "Ustedes van a ir"
Ellos respondieron ¿a dónde?
Xinia les dijo "al estudio bíblico", ¿no los han invitado?
Los muchachos contestaron no, no nos han invitado.
Xinia les respondió "entonces yo quiero invitarles, vengan para que vean..."
Los jóvenes se volvieron a ver uno a otro y uno de ellos decía vamos, vamos, otros dijeron mejor otro día, ahora no podemos.
Xinia les repitió "vengan para que vean, tal vez les gusten y se quedan."
Finalmente los muchachos decidieron venir, y se quedaron al estudio bíblico.
Cuatro de ellos hicieron la oración para recibir a Cristo.

Esto me recuerda a Felipe y Natanael, en Juan capítulo 1:43-46.
Felipe, nos se contentaba con haber aceptado la invitación de Jesús y seguirle, sino que salió a buscar a Natanael, para decirle que había encontrado a Jesús, y le dijo "Ven y ve". Como si dijese "Ven a Jesús y ve por tus propios ojos al Salvador, que puede hacer contigo lo mismo que hizo conmigo.
Felipe no le dijo "anda y ve", sino "Ven y ve", como si dijera "yo te acompañaré"

Xinia, siguió la formula de Natanael al invitar a estos jóvenes, "Vengan para que vean " y los trajo a la casa donde el Espíritu Santo les iba a hablar de Jesús.
Esta noche recibí una gran enseñanza, de cómo ser un cristiano valiente y con convicción, como la de Felipe, con solo decir "Ven y ve", "Vengan a Jesús."

Hechos 1:8 nos dice: "Pero recibiréis poder, cuando haya venido sobre vosotros el Espíritu Santo, y me seréis testigos en Jerusalén, en toda Judea, en Samaria, y hasta lo último de la tierra."
El poder del Espíritu Santo habita en nosotros, los hijos de Dios.
Este poder fue el que le capacitó a Xinia de invitar a esos jóvenes que deambulaban por las calles, y decir "vengan para que vean", y el Espíritu Santo convenció a los adolescentes a venir a Jesús.

Hasta donde estamos convencidos del poder que mora en nosotros.
Hasta dónde, dimensionamos ese poder que actúa en nosotros.
Es un poder que nos capacita para dar una invitación, "Ven y ve".
Es un poder que nos capacita para predicar el Evangelio.
Es un poder que nos capacita para ser un testigo del Señor y para el Señor, es decir ser embajadores de él.
Es un poder que nos capacita para salir a Alajuelita y decir "vengan para que vean".

Los estudios bíblicos de este miércoles, fueron de gran bendición, tanto en La Aurora, como en San Josecito y Lagunilla, se reunieron 106 personas; sin duda Dios se está manifestando cada sábado y miércoles más y más.

Nos gloriamos en Dios, por lo que él está haciendo y hará, y para él sea toda nuestra alabanza.

En Dios nos gloriaremos todo el tiempo, y para siempre alabaremos tu nombre. Salmos 44:8

Aquí algunas fotos del Estudio Bíblico en La Aurora.


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